Por azares del destino escuche dentro de mí una voz que repetía un nombre que no quería escuchar, menos aun en una noche tan distante de todo lo que ocurrió. Era como si algo dentro de mí se hubiera dormido en el instante que nos besamos y hoy despertó sin idea alguna de lo que había pasado en ese entonces. Me preguntaba ¿Qué sucedió? ¿Que sucedió con nosotros? Y una vez más trate de explicarme todo con lujo de detalles.
Cuando termine el relato otro nombre tomo fuerza y golpeo suavemente mis deseos de seguir. Esperare dije entonces. Esperare seguro de que encontrare a la dueña de ese nuevo nombre. Y cuando la encuentre no la dejare escapar. Se que suena a cliché, y no me importa. No ha sido la naturaleza tan sabia que decidió que todo aquello que funcione se repita una y otra vez. Quizá esa es la naturaleza de un cliché se repite solo porque funciona. Solo quiero algo que funcione para mí, aunque ya todo el mundo lo conozca. No quiero ser original, quiero ser feliz. Se que ella existe, se que cada día estoy mas cerca de saber quien es. Por eso no me rendiré, no dejare de equivocarme y quizás me muera cometiendo mil errores pero un día ya sea en esta vida o en la que sigue; o en la siguiente a esa, te voy a encontrar.
Sabes también mi nombre, lo has oído en tu corazón. Sabes que estoy cerca, lo sientes. Yo prevaleceré, porque todo lo que funciona prevalece y aquello que no funciona se desvanece. El amor, el caos, la naturaleza, todos continúan quizá hasta la eternidad, seguro ahí nos encontraremos y con esa promesa seguiré buscándote. Pasare otro año en soledad si ese es el pago por encontrarte, pasare todo el tiempo que se necesite para terminar todas mis existencias a tu lado. Esta noche le daré tu nombre a una mujer y deseare con todas mis fuerzas que seas tu.
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