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sábado, 23 de octubre de 2010

Turista en tu ser.

En el aeropuerto de tu mente,
me paro la inmigración
con cara de delincuente
me pusiste en un rincón.

Después de inspeccionarme todo
dentro de tus pensamientos,
me sacaste del lodo
de una calle del desierto...

... de ese desierto árido
el de tu indiferencia,
me enviaste con boleto al centro
de tu imparable razón,
que desnuda a los intrusos
que de tu mundo no son.

Pase con honores, diciendo
nada más que la verdad
lo que soy, a lo que iba
y me diste inmunidad.

Embajador del amor
pusiste en mi pasaporte
aunque te daba pavor
creías en mi buen porte...

... que podía devolverle
al amor la posición
que por dejar de quererte
le perdiste la pasión.

Semanas y días camine
de la bilis al corazón
del odio hasta el cariño
sin visitar el amor.

Hasta que un día me rendí
y decidí irme de ahí
no encontraba la manera
y en tus ojos me perdí.

Me levantaste un día
del callejón del dolor
y me mostraste un mundo
no tenia comparación.

El paraíso de tus pensamiento
el rincón de tu corazón
todo es bello todo brilla
todo es amor y pasión...
... me diste un boleto roto
yo solo podía ver,
pero me aleje pensando...
yo lo puedo resolver.

Con mis palabras más duras
golpeé el grueso cristal
todo salió volando
y el amor se hizo bestial.

Amor saliendo de ti,
amor solo para ti
quererte es imprescindible...
... te lo vuelvo a repetir.

Y así con mi sonrisa a cuestas,
regrese al aeropuerto
salí de tu mente contento
de la fiesta que hay adentro,

que durara por siempre
que siempre te hará feliz
feliz para amar a alguien...
... que te haga sonreír.

Como un turista llegue
como un turista me voy
aunque conozca todo lo importante de tu ser
no pertenezco a tu mundo; así no me mentiré

Algún día volveré,
maleta en mano y boleto de avión...

... solo de ida a tus ojos,
sin regreso a tu corazón.

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